CIUDAD DE MÉXICO (apro).- Ismael Bojórquez Perea, director de Ríodoce, denunció que a cuatro meses del asesinato del periodista Javier Valdez Cárdenas, la Fiscalía Especial para la Atención de Delitos cometidos contra la Libertad de Expresión (Feadle) y la Fiscalía General del Estado de Sinaloa (FGES) han tenido un “silencio cómplice y criminal” sobre la investigación del caso.
“Le preguntamos al fiscal de Sinaloa; y al gobernador Quirino Ordaz Coppel; y al fiscal federal, Ricardo Sánchez: ¿Qué les falta para dar con los asesinos? ¿Dónde se estancaron las investigaciones? ¿Por qué ese silencio cómplice y criminal? ¿Cuánto tiempo más van a estar ocupando cargos para los que no son aptos por su incompetencia y su falta de valor?”, cuestionó, de acuerdo con un reporte de Ríodoce.
En un plantón realizado en las instalaciones de la fiscalía estatal, acompañado de familiares y amigos del corresponsal de La Jornada y fundador de Ríodoce, Bojórquez Perea aseguró que, aun cuando esas instancias están obligadas a resolver el homicidio, le apuestan “al juego de la bolita mientras pasan los días y los meses, con la idea de que al rato pasen también los años y el caso no se aclare”.
Y argumentó: “La Fiscalía estatal que encabeza Juan José Ríos Estavillo tiene la obligación de investigar el asesinato, pero dejó de hacerlo hace mucho tiempo. Y dejó de hacerlo porque llegó la Fiscalía federal y se apoderó de las diligencias e investigaciones, pero sin asumir la responsabilidad formal, porque no quieren enfrentar los reclamos de justicia”.
De acuerdo con el reporte, el periodista recordó que hace tres meses exigieron a las autoridades que se definieran para saber cuál de las fiscalías se encargaría de las investigaciones sobre el homicidio del también autor de la columna “Malayerba”.
No obstante, afirmó: “No lo hicieron porque la Fiscalía federal no quiere atraer el caso. Y no lo quiere hacer porque el procurador General de la República -Raúl Cervantes-, desde que era senador decía que históricamente las atracciones no habían servido de nada”.
Sin embargo, advirtió que no cederán en el reclamo de justicia y que, si es necesario, harán protestas más extensivas y profundas.
“Ya está claro que a eso le están apostando; a que nos olvidemos, a que nos cansemos. Lo que no saben es que lo que nos cansa y nos harta ahora es su indolencia y su falta de esmero por llegar a los culpables del crimen y castigarlos. A los que jalaron los gatillos, pero también a los que ordenaron su muerte”, dijo.
Como desde el día del asesinato, reiteró que “el origen del crimen de Javier Valdez está en su trabajo periodístico relacionado con los temas del narcotráfico. No sabemos de qué parte, de qué familia, de que organización provino la orden. Pero fueron ellos”.
Ismael Bojórquez aseguró que el reclamo no solo es por el homicidio de Javier Valdez, sino también por el de la periodista Miroslava Breach, asesinada el pasado 23 de marzo en Chihuahua; y el colega Cándido Ríos, ejecutado el pasado 22 de agosto en Veracruz.
“Y por todos los periodistas asesinados. Y por los cientos de hombres y mujeres que en Sinaloa han perdido las vidas en medio de la barbarie y la impunidad, prohijadas la mayoría de las veces desde las mismas esferas del gobierno”, añadió.
En la protesta participaron Griselda Triana, viuda de Javier Valdez, y sus hijos, además de otras familiares, periodistas, líderes sociales, amigos y ciudadanos quienes, con pancartas y a gritos, exigieron “¡Justicia para Javier!”.
Los manifestantes pusieron cruces en los camellones del boulevard Enrique Sánchez Alonso, mientras que en los pilares de las instalaciones de la Fiscalía estatal pintaron manos rojas como símbolo “de la sangre derramada en el estado”.