domingo, 28 de julio de 2013

Mick Jagger camina de la mano de cada nuevo tiempo

 


Decenas de músicos e intérpretes han hecho de "Satisfaction" ese himno anticonsumista que hoy las buenas conciencias de siempre ya escuchan sin sobresaltos.

Arturo García Hernández
Publicado: 26/07/2013 18:56

Mick Jagger llegó a los 70 años. Nadie que lo haya visto en aquellos años frenéticos (los sesenta) de sexo, drogas y rockanrol, le habría dado más años de vida que a Brian Jones, a Jim Morrison, a Janis Joplin, a Keith Moon, Jimmy Hendrix o que al mismo John Lennon. Pero helo aquí, todavía con la energía suficiente para sangolotear las nalgas y hacer dos o tres sprints sobre el escenario, con un cuerpo escuálido como de adolescente, sobre el que oscila una cabeza de reptil prehistórico. Las fotos y videos de los conciertos recientes (apenas en junio) de los Rolling Stones, constatan el prodigio de este Dorian Grey contemporáneo. Sobreviviente de si mismo, se negó a seguir la ruta del martirologio rockero. Y no se le puede reclamar.
Hoy todavía le dicen a Jagger el “chico malo” del rock. La etiqueta es simplificadora y mentirosa. Las canciones, las conductas y los escándalos que le ganaron el mote son de una etapa temprana de la banda (los primeros 10 o 15 años). A ella corresponden temas emblemáticos como Satisfaction o Sympathy for the devil. Después se han sucedido discos y rolas que a veces evocaban o emulaban el espíritu contestatario de aquella etapa y otra veces se adaptaban, con su toque particular, a las modas musicales en turno, dictadas por la industria discográfica.
Esto no significa que Jagger y compañía se hayan traicionado. Han sido, simplemente, síntesis y reflejo de la sensibilidad juvenil de las últimas décadas. Por prgamatismo o por comodidad, Jagger escogió el papel de cronista y no de profeta de su época. Has caminado de la manos de los tiempos, de cada nuevo tiempo. Y así se ha proyectado – a la cabeza de los Stones- como uno de los personajes más influyentes de la cultura occidental en las últimas décadas. Junto a los Beatles. De ese tamaño.
Muestra elocuente de esa infuencia es el número de covers que, a manera de tributo, decenas de músicos e intérpretes han hecho de Satisfaction, ese himno anticonsumista que hoy las buenas conciencias de siempre ya escuchan sin sobresaltos. Es sólo un recuerdo, pero un buen recuerdo. Aquí algunas versiones.

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